“Has adelgazado unos kilos, te ves mejor”
“Deberías cuidarte un poco más”
“Esa chica es un poco grande no? No digo gorda, si no, grande, de complexión”
Gordofobia en el primer ejemplo.
Gordofobia en el segundo
Gordofobia en el tercero.
Sí, estamos rodeados de mensajes gordofóbicos.
Miedo extremo y rechazo hacia todo lo que suponga salir de lo “normativo”.
Los cuerpos delgados.
La belleza del 90-60-90
Los cuerpos sedientos de hambre, ignorados de escucha.
Tener buen tipo, a base de horas de entreno y bocanadas de esfuerzos y sobreesfuerzos para huir/escapar de la naturaleza misma.
Porque el peso corporal no se fuerza.
Porque tenemos una tendencia hacia un equilibrio.
Sin embargo, demasiado temprano hemos aprendido a decir NO a lo que es natural de uno mismo:
La diversidad corporal, la salud en todas las tallas, la aceptación corporal.
En pleno siglo XXI, el movimiento “body positive” está ganando terreno a los mensajes estigmatizantes, enjuiciadores…mensajes de odio hacia todo lo relacionado con estar/ser gordo.
Y podemos pensar: “no, no tengo una actitud gordofóbica. No critico los cuerpos grandes o diferentes, los acepto, y admiro a las personas que son “capaces” de calzarse una camiseta estrecha con tallaje XXL” …
Bien, este pensamiento o actitud (que podemos considerar de aceptación a la diversidad corporal), esconde gordofobia desde el momento en el que, tú (no te sientas juzgado o acusado por dirigirme en segunda persona), tienes miedo o huyes de pesar 80 kilos, o 70, o 60… si bien ahora entras de manera perfecta en una talla 38 (o 36) …
Gordofobia escondida y enmascarada de manera sutil.
Gordofobia en el pensamiento de “operación bikini”, gordofobia en el mensaje de “pierde grasa en 1 mes”, gordofobia en los fit-tés que no dejan de ser un “pipí” caro…
Y bien, dirigiéndome tanto a hombres como mujeres…
Si un día decides ser madre/padre… recuerda:
Aceptar la diferencia.
No rechacemos los cuerpos por ser grandes, por ser delgados, gordos, curvilíneos o rectos.
Y, por último: ¿has elegido nacer con los ojos marrones?, la mayoría de personas de tallas grandes tampoco han elegido su peso.
Feliz reflexión